Las clases se encontraban cerradas. Debían escanear un código que les llevaría a una caja que contenía la llave de clase. Para desbloquearla tendrían que hacer una serie de operaciones matemáticas que nos sirvieron de repaso.
Si conseguían resolver todas las operaciones obtendrían un número que abriría el candado y, por consiguiente, la clase:
1209 ¡La fecha de inicio de clase!
Tras conseguir la llave y abrir la clase, se encontraron con tal desorden (siempre les hicimos ver que era culpa de los obreros). Sus caras no tenían precio…
Para ordenar tal lio, debían coger una silla y resolver aquello que se le pedía:
Ordenar poemas, operaciones matemáticas, diálogo de El Principito…
Una vez realizado, deberían agruparse en función de cada temática.
Y…¡conseguido! Al fin entramos a clase y pudimos ver un poquito de orden en el caos.
¡Bienvenidos al curso!
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